El modelo de arte que propongo es siempre una cuestión o declaración problemática en nuestra sociedad humana; especialmente me interesa la desigualdad en los derechos humanos. Existen diferentes ejes en mi trabajo: la performance, el happening, el video, las instalaciones, la interacción con gente en espacios públicos, los “ready-made” y el sonido son un parte integral en muchos proyectos. Temas como la identidad, la democracia, la igualdad y las fronteras juegan un papel importante en mis proyectos y determinan los medios que utilizaré para llevarlos a cabo. Algunos proyectos consisten en series de trabajos, con los mismos materiales o medios.
Provoco situaciones “incomodas” a través de la interacción humana para ver sus reacciones. Además, el sonido es una herramienta importante dentro del proceso de mi trabajo, ya que colaboro con otros artistas – compositores. El uso de ideas contradictorias es útil para generar sentimientos encontrados.
Otro tema que me fascina es el pensamiento simbólico y su sig¬nificado en nuestra sociedad. Es a través de la existencia de estos símbolos como los humanos son capaces de condicionar tanto sus propias acciones y elecciones, como las de otros. Este “poder simbólico” quería transmitirlo a través del arte. De hecho, me interesa subvertir sus formas y significados y tratar de ver -y mostrar- las cosas desde un ángulo diferente aplicando a ellos una interpretación diferente.